Según me contaron , en tiempos de Carlos III la gente bien comía sardinas, y el rey mandó traer del norte de España un cargamento del preciado pescado, pero tardaron tres días en llegar debido al mal estado de las carreteras.
Las depositaron en Casa Paco, taberna que sigue funcionado en la Plaza de Puerta Cerrada, y al abrir las cajas, el hedor resultaba insoportable, por lo que para no desperdiciar la mercancía, pensaron en darle al pueblo semejante regalito, pero los madrileños, muy sagaces, formaron la comitiva hasta la Casa de Campo, y en lugar de comérselas, las enterraron y lo celebraron con una gran fiesta.
![]() |
De Collages GRACIAS A LAS MAMAS Y PAPAS POR COLABORAR. |